miércoles, 18 de noviembre de 2015

Lectura y Escritura Exploratoria: La inteligencia artificial ¿Hacia dónde nos lleva?

La inteligencia artificial ¿Hacia dónde nos lleva?

Por Renato Gomez Herrera




introducción:
en el siguiente contexto nos redacta el sueño de la raza humana y sus etapas, este sueño es el de crear una vida similar a la de la raza humana corrigiendo imperfecciones y perfeccionando acciones, a lo largo del tiempo la tecnología a brindado una esperanza para ese sueño, en el proceso por alcanzarlo se han formado diferentes ramas en la ciencia y tecnología, un árbol complemento al otro para rendir fruto y uno de estos frutos se llamo ( iA) Inteligencia Artificial.

Desarrollo:
Un vistazo al sueño humano de la creación
cuando en los años cuarenta surgieron las primeras computadoras , se les llamo cerebros artificial es, su apariencia era la de unos enormes armarios llenos de luces y cables, con la capacidad de sumar e hizo imaginar a muchos" mañana las maquinas conversaran con nosotros"

mientras los alumnos de cibernética seguían perforando tarjetas, la industria del cine lanzo su primera visión fu turista , la computadora HAL cuya visión de un mundo perfecto era con la extinción de la raza humana, en la película  2001 Odisea del espacio 


de pronto aquellos enormes aparatos se volvieron mas pequeños y mucho mas fáciles de operar llegaron al alcancé de nosotros de pronto en las casas aparecieron los monitores con un teclado 


¿A nuestra imagen y semejanza?


La palabra robot, acuñada en 1921 por el escritor checo Karel Capek, ya ha dejado de ser sinónimo de androides metálicos. Los robots serán parte de nuestra vida cotidiana. Ya comienzan a ser lo. En el siglo XX, el ser humano intenta reproducir el antiguo mito de la creación
 Que nos sean útiles y podamos interactuar con ellos de una forma cercana, casi natural; por eso se desea poner un cerebro artificial dentro de un cuerpo que imite lo mejor posible al nuestro. Finalmente somos como tristes Gepetos soñando con darle vida a un muñeco de madera para no sentirnos tan solos.
en los años cincuenta, y en la década siguiente vendió su primer robot útil. Pero realmente los robots dejaron de ser ficción en los años ochenta, cuando brazos gigantes que se movían obedeciendo un programa predeterminado, desplazaron a los obreros en las fábricas auto motrices de Japón
En los Estados Unidos han logrado crear un modelo que es capaz de caminar, captar el movimiento de una pelota en el aire,   está conectado a varias computadoras que trabajan a su máxima capacidad intentando coordinar lo que detectan los “ojos” (varias cámaras de vídeo) y el movimiento del brazo y la mano.  Un día, la producción en masa hará a los robots baratos. Si algunos tendrán una figura semejante a la nuestra, está por verse. Lo que parece más factible es que sus cerebros electrónicos tengan algún grado de inteligencia


¿Puede la inteligencia ser artificial?


La inteligencia artificial (IA) puede definirse como el medio por el cual las computadoras, los robots y otros dispositivos realizan tareas que normalmente requieren de la inteligencia humana.
 La IA agrupa un conjunto de técnicas que, mediante circuitos electrónicos y programas avanzados de computadora.  Se basa en la investigación de las redes neuronales humanas y, a partir de ahí, busca copiar electrónicamente el funciona miento del cerebro Deep Blue, que puede vencer a cualquier jugador de ajedrez: no sólo tiene gran cantidad de jugadas programadas, sino que aprende de su adversario Esas redes también se han usado en los autos robot, que pueden circular por las autopistas a una velocidad normal con un excelente margen de seguridad 

¿Qué podemos esperar en el futuro?



 Se espera que en poco tiempo, imitando el funciona miento de nuestro cerebro, las computadoras ya no tendrán un gran procesador, sino miles (y más adelante millones) de pequeños procesadores totalmente interconectados entre sí, lo que permitirá la maravillosa capacidad de aprender a través de experiencias recogidas por los “sentidos” de la máquina (cámaras de vídeo, micrófonos, etcétera).

 Quizá ya no sean necesarios los monitores; unos anteojos inalámbricos de realidad virtual nos mostrarán cómo va quedando nuestro texto. Los teclados también serán tan obsoletos como ahora lo son las tarjetas con hoyitos; en vez de teclear, quizá podremos plasmar palabras en la memoria de la computadora con sólo imaginarlas, gracias a una discreta placa (chip) adherida a nuestra frente. Una voz agradable nos dirá al oído que hemos cometido un error de sintaxis y nos proporcionará, si lo deseamos, una lista de posibles soluciones. En lugar de usar el “ratón”, podremos manipular el texto (o el dibujo, o lo que sea) con el movimiento de nuestros ojos, que será detectado por un inofensivo rayo láser.

¿Pueden pensar las máquinas?

 nuestro cerebro posee aproximada mente 10 mil millones de neuronas y si todavía no sabemos exactamente cómo se interrelacionan para “pensar”, mucho menos podemos reproducir en una máquina ese proceso. Hay muchos aspectos que diferencian al cerebro humano de los sistemas desarrollados por la inteligencia artificial, entre ellos: ¿Pueden pensar las máquinas?
 • Las máquinas carecen de mecanismos intuitivos no tienen la capacidad de reaccionar ante situaciones inesperadas ni la posibilidad de generalizar acontecimientos distintos. 
 • Las máquinas carecen de creatividad, aspecto hasta ahora totalmente humano.

¿Y la gente? 


Al parecer la inteligencia artificial promete un mundo fantástico, pero ¿realmente lo será? ¿Qué pasará, por ejemplo, con la enorme cantidad de seres humanos que no tienen acceso a la educación ni a la tecnología?, ¿qué pasara con las relaciones humanas y con la economía, con la enorme brecha entre ricos y pobres, entre desarrollo y subdesarrollo? No sabemos a ciencia cierta cuál será el futuro de la humanidad, pero sí sabemos que indudablemente cambiarán las relaciones de producción y quizá de comunicación. Es altamente probable, por ejemplo, que se agrave aún más el problema del desempleo; que se transformen radicalmente los conceptos de ocio y tiempo libre; que cambien las relaciones laborales entre patrones y trabajadores; que haya una revolución aún mayor en cuanto al acceso a la información y que se agudicen las diferencias entre países hacedores de tecnología y de aquellos históricamente dependientes. Es casi seguro que la inteligencia artificial y el desarrollo tecnológico subsecuente estarán al servicio de una minoría. Si por el contrario, el desarrollo tecnológico –y específicamente la inteligencia artificial— se utiliza para lograr que todos en este planeta logremos un mejor nivel de vida en estricta relación con el medio ambiente, tal artificio será realmente inteligente.


Conclucion: 
no hay maquinaria tan imperfecta como el hombre, somos un ser decaído complejo y lleno de emociones que es difícil igualar el trabajo,  aun en entre nosotros mismo no hay ningún idéntico a nosotros,  podremos agilizar el trabajo mediante maquinaria e incluso sustituir la manufacturación de los productos con maquinas, pero esa parte imperfecta en nosotros mismo es la que marca la diferencia, humano y maquinas deben implementarse en uno solo, nunca buscar la sustitucion de el uno por el otro.



Referencia.
         Renato Gómez Herrera, licenciado en literatura dramática y teatro. La Inteligencia Artificial ¿Hacia dónde nos lleva? Revista ¿Cómo Ves? Enero 1990.

Reflexión.
¿Por qué has elegido este tema?
      es interesante como el mismo humano busca la perfección en los objetos mas sin embargo no busca perfeccionarse el mismo, no estoy en contra de la tecnología pero como dicen mucho de algo es malo hay cosas en las que el ser humano no puede igualare y es el punto que quería tocar
¿De dónde partiste para comenzar a escribir?

         Al comenzar al leer me di cuenta que no hay un sueño que no se pueda alcanzar antes era irreal robots comunicandoce con humano o ayudando los en tareas, vivimos en un mundo que antes era ficción



















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